jueves, 28 de octubre de 2010

Home, sweet home


No hay mejor lugar que tu propia casa. Sí, está muy bien cambiar de aires; porque tienes libertad, haces lo que quieres, etc. Pero, siempre es necesario ese calor de hogas que solo te da tu casa.
Siempre me he querido ir fuera, conocer mundo, pero hay un momento en la vida en el que te das cuenta lo que has dejado atrás, en tu hogar. Se sobrevive, sí; te lo pasas bien; y también aprendes muchas cosas, pero siempre habrá algo que te falte (aunque sea la simple chorrada del olor del suavizante que utiliza tu madre).
Sin embargo, a veces somos tan cabezones o queremos transmitir tal frialdad que no lo aceptamos y queremos aparentar firmeza y fuerza ante cualquier añoro. Pero, por encima de todo cualquiera que esté fuera de casa coincidirá con este dicho: "Cómo en casa en ninguna parte".

martes, 26 de octubre de 2010

La Red Social

Este fin de semana he tenido el placer de ir al cine y ver La Red Social, una película que me ha encantado. El cine lleno: niños, jóvenes, adultos, jubilados. Todos reunidos con un mismo objetivo: ver en pantalla grande como surgió uno de los fenómenos de nuestra década, nada más y nada menos que el Facebook.



El Facebook revolucionó el campo de las redes sociales hace unos 6 años, cuando un grupo de estudiantes de la prestigiosísima Universidad de Harvard idearon un proyecto que serviría como red social en la misma universidad. Poco a poco la página se abrió a otros lugares de Estados Unidos y hasta ahora, donde casi todo el mundo está comunicado a través de este sitio web.
La verdad es que tanto Facebook como Tuenti en España como otros operadores en otros países han cambiado la forma de comunicarnos. Por ejemplo, el otro día escuché a unos padres indignados porque sus hijos ya no quedaban vía teléfono, sino que ultilizan las redes sociales para quedar a alguna hora con los amigos. Ellos decían que esto acarreaba un problema, que cuando uno no se conectaba pues no sabía si los amigos saldrían o no, a lo que los hijos les contestaban: Si quiere saber si hemos quedado, pues que se conecte, ¡no es tan difícil! En este aspecto, los padres afirman que las redes sociales hacen demasiado "daño" en las relaciones entre sus hijos y los amigos. Pero, está claro que todo cambia en esta vida: los padres no tenían tecnología y ahora los hijos si y de igual manera, las relaciones de amistad eran de una determinada manera y ahora son de otra.
Ahora, todo es diferentes, pero, ¿es mejor o peor? Eso según quien lo mire.

sábado, 23 de octubre de 2010

Gran pérdida

La gente se aburre, eso lo sabemos todos; si no los programas "rosas" tipo Sálvame y todos sus derivados no serían los más vistos de la tele. Pero de ahí a que todo el mundo quiera meterse en la vida de los demás hay un largo camino. Por ejemplo, una persona con la que no has hablado más de diez minutos, ¿qué derecho tiene a juzgar lo que hagas o dejes de hacer con tu vida?. Lo veo innecesario. Eso sí, lo hacemos todos, pero de la misma forma lo negamos.
La independencia de las personas brilla por su ausencia en esta sociedad. Lo que está de "moda" es seguir a alguien, tener a alguien a quien admirar, etc. Pero no hablo de gente "famosa", si no de gente a tu alrededor: amigos, vecinos, novios, familiares... La esencia de la persona, por así decirlo, se pierde. Y, me da pena, porque yo cuando quiero a alguien lo quiero por quien es, no por quien aparenta ser.